Un vestido nuevo e increíble con arrugas, el pintalabios rojo ya casi no queda sobre los labios, el rimel en forma de gotas negras en el rostro, heridas en los pies por culpa de unos zapatos preciosos... Todo era perfecto seria una noche de ensueño, pero como todo sueño... Siempre se desvanece y nos vamos corriendo de donde se desvaneció.
Se acabó la esperanza, ponerse guapa ya no tiene sentido, nadie ve el sufrimiento de ese corazón que siempre sonríe con esa sonrisa un tanto forzada y el mundo se la cree. Nadie ve que cuando habla, quiere decir las cosas al contrario, que por no hacer daño a ellos se lo hace así misma. Quiere ver al mundo feliz. Ella solo espera que alguien se de cuenta de todo, pero sin tener que decir nada. Pretendía ser algo "princesa" para tener alguna esperanza de que alguien se diera cuenta, pero aun así... Es la "princesa" invisible.
Ahora cambia, su vestido reluciente por una sudadera, su maquillaje se resume en un bálsamo labial, en sus pies lleva unas deportivas. Y ahora tiene un refugio en el que puede ser invisible tranquilamente sin preocupación: la capucha y los cascos con música a todas horas.
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